Huérfano

Un oscuro personaje de una historia pasada seguía la vida que ella pisaba.
Ciega a voluntad. Sorda de callar. Tendida en el pavimento de esa avenida transitada.
Vendía trozos de su ser a hombres de vago andar.
Insensible y vacía parecía volarse en la tormenta de jueves.
Pero era mejor que hundirse en ese círculo de costoso metal.
Atada de pie y manos a una piel avioletada.
Con el alma machucada.
Cruza cada mañana la vereda de ese templo donde las miradas de blancos años clavan sus susurros en el alma.
Camina altiva aunque desganada a su cárcel de cristal.
A los brazos de la voz inocente que la mira condescendiente.
Su inhumanidad no le permitió afrontar que el espejo no la iba a saludar.
Y un reflejo fabricado de cebada, da respiro en la noche hasta caer agotada.
Y un conjunto de sustancias la aparta a su realidad fabricada, donde un relámpago del cielo la lleva a la eternidad, inmaculada como princesa en los brazos de un blanco semental.

Clara

Serenamente clara camina radiante.
Con la mente curtida en sueños y el andar pesado de una vida de grises, se vio su sombra frente a la luz.
Se desnudó a los ojos de su amor esperando sagrar para sentir.
Y perdió en medio del camino su calzado favorito.
Y esperó que caminara por si mismo hacia ella, que de alguna sencilla manera su error se solucionara sin molestarla.
Pero el odio la vio desamparada en un oscuro barrio de una zona peligrosa, la abrigó de un fuerte abrazo y le dio un nuevo color que guiara sus pasos.
Nadie recuerda el día de la paz blanca.
Nadie recuerda el día donde su furia se vio oscurecer.
Sin embargo, un alma perdida recuerda su voz doler al gritar el sangriento rojo pasión de su ser.
Sobre una pelusa en el aire del atardecer su recuerdo vuela buscando la comodidad de los grises que dejó atrás y su cotidianidad.

OSCURA

Difícil se le hace al a sombra
ser parte de ti
y que no la tengas en cuenta.
Tristeza le da ver que solo
en situaciones límites puedes verla.
Y le agradece tanto al fuerte sol
como a la terrible tormenta.
Tristeza le da no poder llorar
ya que ambas tendrían que hacerlo
solo queda callar, aguantar.
Fortaleza le da la noche
cuando con su negro manto la cubre
haciéndola desaparecer.
Pobre solitaria, explícale.
Por qué no le cuentas
que tampoco te tienen en cuenta.
Dile que a ti también te registran solo cuando estas al límite.
Dile que también debes
callar, aguantar, que
tampoco puedes llorar.
Cuéntale que también
desapareces con el
negro manto de la noche;
y que no mienta
que no desaparece sola. desaparecen juntas y más acompañada que nunca

DE ENRRIEDOS, DAGAS, CARIÑOS Y DUDAS

Confianza ciega q brinda al mundo
dudas q recibe hasta del mismo aire q respira
cariño q esparce por el mundo, cual sembrador su semilla
esperando que siempre caiga en tierra fértil
silencios de quienes debieron responder "te quiero"
dagas siempre recibidas y acusadas de ser empuñadas
corazones sordos q se aíslan cada grito un poco más

besos venenosos
abrazos deshonestos
caricias falsas
sonrisas actuadas
miradas esquivas

la vida q a sus ojos era transparente como un trozo de cristal
y la vida como caleidoscopio para la mirada de los demás

ser y parecer
dar e interpretar
realidad vs. fantasía

la verdad, la vida, la honestidad, la sinceridad
debatiéndose con
la mentira, la depresión, la falsedad y el juzgar

y quien era, perdió valor frente a la cuerda floja a la q llaman vida
tubo más poder lo q parecía ser;
pesaron más las dudas, la susceptibilidad y los malos entendidos

y desde un precipicio se vio caer su desesperada honestidad, su seguridad y su tranquila conciencia

se cansó de ser el salmón que nada contra la corriente
y se dejó ser alimento "del oso", Ese, El único q pudo quebrantarla

ya en el estómago usó una de sus mismas espinas
y la clavó en su corazón
pera q su sacrificio fuera sentido en cada uno de sus latidos
y así VIVIR aunque sea en Su dolor....

Mi Vértice

Eres la eterna contradicción, solo escucharte puede hacerme inmensamente feliz o profundamente desdichada.
El ritmo que cantan mi espíritu, mi mente y mi corazón en simultaneidad
Mi liberación, mi descarga a tierra.
Percibirte en ese exacto momento es tocar el cielo con las manos, sentir tu posesión sobre mí. Esa mezcla de placer y desamor, ese feliz agotamiento que recibo con los brazos abiertos.
La paz y la locura al unísono, la luz propia que mi ser entrega a tu oscura calidez.
El éxtasis vivo en la cruel realidad.
Es mi cuerpo solo respondiendo a tu voz.
Soy Yo en mi más libre expresión.
Es tu ritmo conduciéndome y mi voluntad a tus pies.
Es la entrega personal, el ir más allá, desafiarme en verdad, la esencia de mi momentánea realidad.
La furia de saberme expresar al compás de la vida que llevo, mi ser natural libre a tu normalidad.
Es estallar tu toque en mi vértice esencial.

(L)

Es la luz en medio de la noche, y la estrella inalcanzable de ese nublado cielo.
Es la tranquilidad de un cigarrillo y el humo en sus pulmones.
Es la paz del alma después de la plegaria, y la incertidumbre de saber si fue escuchada.
Es la histeria de la borrachera y el accidente que perfila su estado al volante.
Es la noche de lujuria y la medicina de la mañana.
Es el ocaso en el mar y el amanecer en la oficina.
Es su pecho en las noches y la cama vacía en las mañanas.
Es baile y música, y el silencio con una lágrima.
Es el sueño y el inexistente futuro.
Es el radiante sol del medio día y el nubarrón en la siesta.
Es la sonrisa y la lágrima,
El abrazo y el golpe,
El sol y la nube,
Es el otoño de la vida en la primavera del alma.
Es la antítesis de la que te habla el oriente.
Es la esencia de mi felicidad y también la de mi tristeza.
La bienvenida y el adiós.
La mirada que busco y los labios que no tengo.
El trofeo por el cuál pelean mi cielo y mi infierno.